EL CÓNDOR DE LOS ANDES

El cóndor de los Andes

Cóndor andino

poder y fortaleza

en libertad.

Negro azulado

y alas de punta blanca

son su plumaje.

Cielos azules

y nevadas montañas

sobrevolando.

El cielo cruza

con majestuoso vuelo

a gran altura.

Mángelbe.

Fuerza, poderío y libertad.

El cóndor de los Andes.

El cóndor de los Andes es el ave voladora más grande del mundo. Su envergadura puede llegar casi a los 3.50 m. y su longitud de pico a cola puede sobrepasar el 1.50 m. y llega a pesar hasta 12 kg. El cóndor  pertenece a la familia Cathartidae, palabra derivada del griego "Kathartes" que significa "el que limpia".

Su plumaje es negro y al final de sus largas alas hay una banda blanca. Es una ave carroñera, es decir que se alimenta de animales muertos y en descomposición. Por su función de carroñero es una pieza importante en el equilibrio de los ecosistemas del que forma parte y es muy útil para la salud de muchos animales, porque al consumir rápidamente los cadáveres elimina fuentes de contacto de enfermedades o focos de contaminación. Por eso hay que evitar su desaparición. Un cóndor puede ingerir unos 5 kilogramos de carne en un día y asimismo puede ayunar hasta cinco semanas.

Los machos poseen una cresta que los diferencia de las hembras y el iris es de color café claro, mientras que la hembra no posee esa cresta y su iris es de color rojo. Lo jóvenes son parduscos con las alas y la cola más oscuras.

Son aves solitarias que pocas veces se ven acompañadas. Viven la mayor parte del tiempo volando y aprovechando las corrientes de aire caliente para mantenerse suspendidos en el aire, solamente aletean cuando no hay viento o cuando van a despegar. Pueden alcanzar alturas hasta de 10.000 metros y alcanzan territorios de hasta 120 Km. Tienen el sentido de la vista muy desarrollado. El cóndor pasa la noche refugiado en cuevas en la montaña.

Se reproduce cada 2 años y ponen un solo huevo que incuban ambos padres durante 48 días. El joven  se mantiene con los padres algo más de un año. Legan a la edad adulta a los 8 años y pueden vivir hasta 50 años. Se sabe que son monógamos durante toda la vida.

Actualmente está en peligro de extinción, uno de los motivos ha sido el exterminio a manos de los humanos debido a la creencia de que cazaban ganado vivo y que ciertas partes de su cuerpo tienen poderes terapéuticos o mágicos.

El cóndor de los Andes tiene su parte mística, los incas creían que el cóndor era inmortal. Según cuenta el mito, cuando el animal siente que comienza a envejecer y que sus fuerzas se le acaban, se posa en el pico más alto y saliente de las montañas, repliega las alas, recoge las patas y se deja caer a pique contra el fondo de las quebradas, donde termina su reinado. Esta muerte es simbólica, ya que con este acto el cóndor vuelve al nido, a las montañas, desde donde renace hacia un nuevo ciclo, una nueva vida. El cóndor simbolizaba la fuerza, la inteligencia y el enaltecimiento o exaltación. Era un animal respetado por todos aquellos que vivían en los Andes desde tiempos prehispánicos, ya que no sólo traía buenos y malos presagios, sino que también era el responsable de que el sol saliera cada mañana, pues con su energía era capaz de tomar el astro y elevarlo sobre las montañas iniciando el ciclo vital.

Aparece representado en los escudos de armas de varios países sudamericanos, Chile, Colombia, Ecuador y Bolivia. Representa la fuerza, la libertad, el poderío, la grandeza y el valor... La búsqueda de horizontes sin límites.